Casi me da un síncope cardiaco primero, una desagradable sorpresa después y por último una carcajada enorme, cuando me enteré que el Sr. Jose María Rodriguez anda desesperado buscando apoyos, por lo bares cercanos al congreso, (ni para eso tiene clase) para presentarse de candidato a la presidencia de un partido corrupto.
La carcajada se debe sobretodo , que a pesar de que los populares viven en una dimensión y una realidad paralela a la real y que se desentienden y desembarazan con demasiada facilidad de cualquier situación que ponga en evidencia sus oscuros enjuagues, que por ciertos son demasiados y constantes, no son tan suicidas e imbéciles como para apoyar a un personero, que su único y obsesivo deseo, es acceder a una jubilación holgada y con alguna cuotita de poder y respeto, cosa que a lo largo de su tibia carrera política ha tenido tanto peso como la de un paquete de palomitas.
En el PP balear el horno no está para apoyar una candidatura tan débil, discutida y discutible como la del pusilánime anciano sin canas, que dió por terminada su inútil e ineficaz andadura pepera, cuando le dió el chivatazo al alcalde de Andratx Eugenio Hidalgo, de que iban a por él, transformando esta acción en la mas importante y trascendental de su carguito.
Este patético personaje que aún goza de su único y último privilegio, que es el parquing en el congreso, debería de pedirle trabajo al ex alcalde, como vigilante o chofer de algunos de los tantos coches de lujo que aún posee, en lugar de carecer del minimo sentido común, buscando apoyos que ni siquiera los mas radicales o chorizos del partido, están dispuestos a darle.
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