Ocurrió lo que sanamente tenía que ocurrir, que el Sr. Rodriguez se fuera a casa.En lugar de hablar de lo inútil que fué en el cargo en su partido, debiera contestar que fue lo que hizo por el ciudadano tanto de su partido como por el que no lo era.
Rodriguez es el típico político calienta asientos, que entre sus mejores máximas esta la de : Quien nada hace nada teme. Y cuando digo "Hacer", me refiero a algo productivo y de bien común y no a dedicarse a pelotear a quien pueda cooperar a que su nulo peso, parezca relevante.
Es el estereotipo de hombre tibio, de soldado que se hace el muerto para no luchar, del compañero que nadie quiere tener al lado, porque en el momento mas delicado y peligroso te dejará solo y se salvará solo él, en fin, que nadie lo extrañará, que nadie lo buscará ni para consejo ni para ninguna otra cosa dentro del PP.
Si tuvieramos que hacer una lista de los mas impresentables, inútiles y vomitivos personeros del PP, seguramente J.M. Rodriguez estaría en esa lista, aunque no se en que lugar ,ya que hasta en eso, su peso político se asemeja a una bolsa de palomitas.
Ahora se aferrará a su carguito de diputado balear para intentar mantener su alicaída y poco respetada situación y su afán de ser "alguien", cosa que sin su placa parlamentaria es imposible.
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