Estos adláteres de Escribá de Balaguer, Marcial Macel u otros impotentes iluminados como lo es nuestro flamante Ministro de Justicia Gallardón, viven con la obseción de manejar, manipular, vigilar e inmiscuirse en las intimidades mas humedas de las mujeres. No se si lo hacen por trancas, taras o complejos que los marcaron de pequeños en los confesionarios de sus colegios de curas o si tienen que ver con un misogismo innato y recalcitrante.
El que en medio de este caos económico que tiene sumergidos a los españoles en los contenedores de basura en las puertas de los supermecados, no se entiende como una de las prioridades del Ministro sea la de condenar a parir por ley (su ley) a las mujeres embarazadas de seres malformados que obligará a vivir un sufrimiento de por vida...¿vida?
De lo que no se entera el Ministrito al que Jimenes Losantos bautizó como "maricomplejines" es que no puede poner la carreta delante de los bueyes, ya que primero debe crear una infraestructura social, capaz de acojer, atender y mantener a esos seres que obligará por decreto a nacer y luego poner en práctica sus dogmas y preferencias religiosas.
No estaría mal , que las mujeres que decidieran acceder a este capricho perverso del ministro, fueran a entregar a las criaturas (a falta de servicios públicos) a las puertas del ministerio o al propio domicilio de tan buen samaritano. En ese momento se sabría si estos casposos y retrógrados politicuchos son consecuentes con sus ideas y están a la altura de lo que pregonan...............para otros.
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