Kühn y la Norma Duval

Al final, ese dicho o refrán que dice que ^cada oveja con su pareja^; toma cuerpo, cuando me cuentan que el tal Mathías Kühn, conocido especulador inmobiliario y fanfarrón, anda empecinado en pegarle un braguetazo a la ex-bataclana recién separada de un veterano y decrépito ex-productor de variedades circenses.

Norma Duval, como ya dije, ex-bataclana, buscona profesional y ahora empresaria de una cadena de tiendas cutres "Punto Roma", con nostalgias de tablas y figuración, estuvo por Mallorca, montando un tongo para relanzar su vuelta a la farándula rosa, y lo hizo nada menos que en uno de los feudos de este otro caza-"famosos", amigo de la mayoría de los políticos implicados en corrupciones varias del mandato balear anterior, llamado Tagomago

Como vosotros sabreis, Tagomago es una isla privada, contigua a Ibiza, en la que gracias a este "artista" inmobiliario, la flora y fauna autóctona, se ha visto y se ve flagrantemente violada y avasallada sin ningún miramiento.
Pero no comentaré los entretelones de este y otros territorios baleares que estan en capilla para darles el tiro de gracia y seguir construyendo, sino que la ironía que implica que la listilla bailarina de cabaret, se entienda con otro listo condenado judicialmente por uno de los tantos y tantos viajes con el cántaro del agua...ya saben, ese que al final se quebra.

Lo que no sabe este ultimo personajillo, es que los braguetazos de la Dubal se los cobra a precio de oro y que todas sus relaciones con vejetes teñidos y con buenas cuentas corrientes han sido por amor, (por amorzar me imagino) ,y esta no sabe que Kühn no da puntada sin hilo; en fin............... Dios los crea y el Diablo los junta.

Ya veremos en que termina esta relación-negocio, digna de un culebrón venezolano.

N del E : Se han fijado el parecido de Kuhn con el alcalde de Londres Boris Johnson ???

por cierto agregandole algunos años a este último.

Capaz que el alemán utilice este reclamo a partir de este descubrimiento mio, para venderle casas a los políticos britanicos; por tanto no le cuenten de la existencia de tal doble, a no ser que me asegure alguna comisión.