EXTRAORDINARIA la acción de la Policia de Madrid, de multar por mal aparcamiento, a ciertos coche oficiales de ministros que juraban su cargo.
El mérito es mayor, porque no se trató de una equivocación de los funcionarios por no haber visto los vistosos distintivos, sino que les impusieron las sendas boletas a sabiendas que se trataba de estos coches.
Es cierto que los ministros verán en esto, algo solo anecdótico y de seguro que si la multa prospera administrativamente no la pagarán de su bolsillo, pero sienta un excelente precedente, de cara a los ciudadanos plebeyos y comunes.
Enhorabuena a la Policía de Madrid, también a Gallardón que imagino que intenta con estas acciones, que la ley pareja sea menos dura (en la medida de lo posible).
También una lección para las policías de Mallorca, que al contrario de lo que sucede en la capital, acá reaccionan solo con reverencia servíl, cuando algún pez gordo local hace de las suyas o es sorprendido en infracciones flagrantes.
Después nos quejamos que nos miren como provincianos tontos.
Es Mallorca al Desnudo.
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