-Hace ya tiempo que me dí cuenta, de la talla de ciertos panelistas de nuestra televisión y a los que ésta, mantiene en la memoria colectiva, ya no por sus "hazañas", sino por la pobreza, la inmundicia y lo miserable de sus acciones, haciendo que éstas parezcan ejemplos a seguir o modelos a imitar. Verdaderamente, si la TV es un reflejo de nuestra idiosincracia , cultura o moral, lo tenemos chuuuungo.
-El que la mayoría de los protagonistas de programas de TV, sean futbolistas, toreros, modelos y cantantes, nos da una clara muestra del nivel intelectual de nuestros representantes y programas; pero si a eso sumamos las ramificaciones infinitas generadas por estos payasos con complejos de alguien, con los que se relacionan, tenemos un resultado exponencial de imbecilidad.
-El que a unos ignorantes y vastos matadores y flageladores de animales se les de cobertura mediática llamandolos "Maestros", que a una patética ex pareja de uno de estos matarifes se le ponga a opinar de nada, por el único mérito de haberse abierto de piernas ante un homólogo de su mismo pelaje y que todo el séquito de una familia que se cree aristócrata por tener un integrante que apenas balbucea cuatro palabras seguidas, es del todo incomprensible y digno de un estudio antropológico.
-El que el hijo de una cantora, con claros razgos de mongolismo, el que ex alcaldes corruptos que viven en la cárcel por poco tiempo, mejor que como usted o como yo, que mas encima cobren pasta que cualquiera ganaría en su vida entera, por contar como nos han tocado los huevos, nos hacen temblar de rabia e impotencia, de que los decentes trabajadores y honrados, tengamos que mirarlos casi por obligación y a diario en el único medio de entretencion que tenemos los pobres, la puta TV.
-No digo que los canales nos tengan que brindar programas científicos, culturales o conciertos, ya que esto podría generar un colapso mental, sino que por lo menos renueven los personajillos que por su repetición majadera, ya nos tienen hartos.
-El que la mayoría de los protagonistas de programas de TV, sean futbolistas, toreros, modelos y cantantes, nos da una clara muestra del nivel intelectual de nuestros representantes y programas; pero si a eso sumamos las ramificaciones infinitas generadas por estos payasos con complejos de alguien, con los que se relacionan, tenemos un resultado exponencial de imbecilidad.
-El que a unos ignorantes y vastos matadores y flageladores de animales se les de cobertura mediática llamandolos "Maestros", que a una patética ex pareja de uno de estos matarifes se le ponga a opinar de nada, por el único mérito de haberse abierto de piernas ante un homólogo de su mismo pelaje y que todo el séquito de una familia que se cree aristócrata por tener un integrante que apenas balbucea cuatro palabras seguidas, es del todo incomprensible y digno de un estudio antropológico.
-El que el hijo de una cantora, con claros razgos de mongolismo, el que ex alcaldes corruptos que viven en la cárcel por poco tiempo, mejor que como usted o como yo, que mas encima cobren pasta que cualquiera ganaría en su vida entera, por contar como nos han tocado los huevos, nos hacen temblar de rabia e impotencia, de que los decentes trabajadores y honrados, tengamos que mirarlos casi por obligación y a diario en el único medio de entretencion que tenemos los pobres, la puta TV.
-No digo que los canales nos tengan que brindar programas científicos, culturales o conciertos, ya que esto podría generar un colapso mental, sino que por lo menos renueven los personajillos que por su repetición majadera, ya nos tienen hartos.
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