Enhorabuena a este Rey.Al fin ha podido articular un par de frases seguidas sin leer discursos que le escriben otros.
Tanto master, tanta sangre azul, tantos títulos, tanta vida regalada y este jefe de estado pseudo-democratico no se atreve a hablar sin papel, ni a dar entrevistas sin que estén amañadas siguiendo la tradición de su papi.
A su lado, el anfitrión Obama es un gigante de la oratoria, que se ganó por ello y democráticamente la presidencia de el pais mas poderoso del mundo.
Aquí, por nuestra tradición sumisa de besamanos y genuflexiones, tragamos lo que nos pongan.
En fin.....entre la madera de estadista de nuestro Rey y la de Obama ha quedado de manifiesto que no solo hay un oceano de distancia, sino galaxias enteras.
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