No es que Bono sea santo de mi devoción, sobretodo por sus complejos de burgués nuevo rico y socialista, por su emparentamiento con el cantor Rafael y con su implante de pelos, pero que el PP las emprenda contra él, acusándolo de que su patrimonio no cuadra bien con la miseria que gana como político, es verdaderamente de náuseas.
Cospedal, Soraya y todo el comité creativo de esta derecha tan esperpéntica, han instalado un ventilador gigante detrás de toda su mierda interna, con el fin de salpicar a quien haga falta, para que sus excesos, prevaricaciones y múltiples delitos cada dia mayores, se mimeticen entre las sospechas de cualquiera que tengan a tiro.
Si hacemos un vago analisis de los acontecimientos políticos mas mediáticos actualmente; todos tienen su génesis en el caso Gurtel, que al parecer los tiene desesperados por las cada vez mas nutridas evidencias y en lugar de defenderse y desembarazarse de los ladrones (presuntos), intentan buscar la paja en el ojo ajeno, revolver el gallinero, lanzar bombas de humo y de engañar al mismo diablo, ya sabemos con que fin.
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